EL CARNÉ DEL BUEN ESTUDIANTE: GAMIFICACIÓN EN EL AULA
¿Te gustaría gamificar tus clases y quieres ideas? Aquí te muestro un material que funciona genial en las clases de español :)
¿ALGUNA VEZ HABÉIS TENIDO UN CARNÉ DEL BUEN ESTUDIANTE?
¡Hola a todos! ¿Cómo estáis? Yo encantada con la vuelta al cole y de poder disfrutar con mis niños en clase.
Hoy quiero compartir con vosotros un material que uso con mis estudiantes de español y que funciona genial en las clases de español online para niños y jóvenes.
Este material lo creé con el objetivo de ludificar mis clases y darles todavía más sentido; un significado conjunto entre profesor y alumno. Y es que, a todos nos encanta alcanzar objetivos y recibir recompensas por todo nuestro esfuerzo, sobre todo recibir aquellas que nos hacen feliz por mucho tiempo (no hablo de cosas materiales, por supuesto).
Pero, ¿de qué va esto de la ludificación o gamificación en educación infantil?
Bien, pues simplemente se trata de una técnica de aprendizaje que tiene muchísimo potencial. Consiste básicamente en:
- Trasladar la mecánica de los juegos al ámbito educacional. Es decir, lo que comúnmente se dice "aprender jugando". ¡Genial! ¿No? Ojalá muchos de los profesores de primaria y secundaria que he tenido hubieran tenido esto en cuenta ...
- Interiorizar los contenidos didácticos mediante el aprendizaje lúdico y significativo. ¡Oh la la! Nos divertimos y, encima, aprendemos. ¡Esto sí que es genial!
- Mejorar la motivación por aprender e incentivar el ánimo de superación. ¡Wow! Esto sí que es la bomba :) ¡Así, sí que sí!
- Sentir la recompensa durante y después del aprendizaje por haberte superado. Y, ¡qué a gusto se siente uno cuando alcanza su objetivo! :)
Entonces, ¿qué se me ocurrió para recompensar a mis estudiantes y llevar a cabo una retroalimentación constructiva al final de la clase? Pues, este bonito carné del estudiante, el cual siempre nos acompaña en cada clase de español online para niños. Pero os preguntaréis...
¿Cuales son los objetivos del Carné del buen estudiante?
- 1. Valorar el aprendizaje particular de cada alumno a través de 4 preguntas básicas que atañen a las 4 competencias lingüísticas. Es decir, ellos mismos se preguntan en voz alta: ¿he leído bien? ¿He escuchado bien durante la clase? ¿He hablado y escrito bonito? Todas estas preguntas las reflexionan ellos y me cuentan cómo las valoran para llevar a cabo la autoevaluación. Asimismo, yo también les doy mi opinión y la refuerzo con cuños como estos.
- 2. Motivar a los alumnos y hacerles sentir que "todo esfuerzo merece la pena". En el carné verás que hay varios cuadraditos por cada competencia lingüística (hablar, escribir, escuchar y leer). Es decir, si cumplen los objetivos de clase, recibirán un cuño y una carita feliz según las competencias. Si al cabo de un mes tienen 4 caritas felices por competencia, tendrán su regalo, el cual pueden canjear por uno de los deseos que han escrito detrás del carné, concretamente en "la lista de deseos". Estos deseos tienen normas; es decir, son deseos experienciales, negociados y acordados previamente con sus padres, y que nunca pueden convertirse en cosas materiales. ¡Y ellos la mar de contentos! :)